El texto realizado a través de Ediciones Universitarias de Valparaíso –sello de la PUCV- recoge su tesis doctoral realizada durante tres años en la Universidad de Pisa en Italia, recabando antecedentes sobre este destacado historiador ateniense que se sigue estudiando por su aporte a la Diplomacia y las Relaciones Internacionales.
En la Sala Héctor Herrera Cajas del Instituto de Historia de la PUCV se efectuó el lanzamiento del libro “Recepción Histórica y Política de las Historias de Tucídides. Algunos casos en lengua hispana” escrito por el académico de esta Unidad Académica, Paulo Donoso Johnson.
El libro fue presentado por la profesora María Gabriela Huidobro, decana de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Andrés Bello y recoge en extenso la tesis doctoral del profesor Donoso realizada durante tres años en la Universidad de Pisa en Italia, donde recogió valiosos antecedentes de este militar e historiador del siglo V antes de Cristo, llamado el siglo de oro de Atenas.
El profesor se hace cargo de la gran obra de Tucídides, en cuanto al significado e importancia que ha tenido en los pueblos de habla hispana y a lo largo de sus páginas realiza un minucioso análisis de los diversos problemas surgidos en la recepción de Tucídides en España desde el siglo XIV; el conocimiento de los clásicos griegos desde el siglo XVI y las virtudes y defectos de la primera traducción en lengua castellana de la obra realizada Diego Gracián de Alderete.
El lanzamiento contó con la asistencia del vicerrector Académico, Nelson Vásquez; el Profesor Emérito de la PUCV, Bernardo Donoso; el director del Instituto de Historia, Ricardo Iglesias, entre otros profesores y estudiantes.
Al respecto, el director Ricardo Iglesias señaló que “Paulo Donoso ha tenido una presencia destacada en el Instituto de Historia y ha dedicado esfuerzo, recursos y talento en beneficio de nuestra Universidad. En el caso del libro, se ha destacado públicamente con la idea de realizar un texto de probablemente el historiador más emblemático de nuestro Instituto: Tucídides. Es y ha sido uno de los referentes que todos los alumnos deben leer, conocer y estudiar”.
¿Cómo surgió la inquietud de investigar el aporte de Tucídides?
“La inquietud para analizar la lengua de Tucídides en lengua castellana no es mía. Llegando a Italia, me contacté con Umberto Laffi que es Doctor Honoris Causa de la PUCV y en Pisa me recomendó que comenzara a trabajar en algo distinto a lo que se había hecho. Tucídides se ha abordado desde el mundo antiguo. En castellano, poco se ha hecho. Tomé ese desafío que era muy difícil, pues tuve que adentrarme en el mundo de la Edad Media y el Renacimiento, tratando de hacerlo de manera histórica. Esto me llevó durante los tres años que estuve en Italia a visitar además la Biblioteca Nacional de España, donde están los manuscritos originales de los textos del siglo XIV y XVI”.
“En mis viajes a Chile, durante el periodo de investigación, entrevisté a traductores vivos de Tucídides para que me dieran su parecer sobre la obra, lo que habían entendido y que mostraran a través de su experiencia y vida académica cuáles fueron los aportes de sus antecesores para reconstruir el Chile intelectual de los años 80, donde se hizo la primera traducción. Fue un desafío muy interesante”.
Revisando el libro, se aprecia muy bien la evolución de Tucídides desde sus primeros textos hasta aquellos que llegaron con sus documentos a Chile…
“Esto obedece a cómo se realizan los estudios en el Instituto de Historia de la PUCV, donde nuestro fuerte es la historia universal. Siguiendo esa misma línea, dándole un énfasis importante al origen, fue interesante pesquisar cómo llega Tucídides a Chile. No tenemos ningún indicio. Pude constatar que había coleccionistas, miembros de la Iglesia que tenían textos en sus bibliotecas. Era algo raro y exótico. Recién en el siglo XX se empieza a trabajar como un autor referente para analizar la política, la diplomacia y las Relaciones Internacionales. Se mantiene guardado en anaqueles sin tomar el valor que poseía en Chile”.
Tucídides sigue siendo un referente en la actualidad aunque es del siglo V…
“Algunos autores de las Fuerzas Armadas y Centros de Estudio de Relaciones Internacionales toman a Tucídides porque es de los primeros teóricos que hablan de conceptos que en la antigüedad eran muy claros. Por ejemplo, cómo se trabaja el poder con el más débil, los elementos psicológicos en Tucídides. El tema del miedo es fuerte en la Guerra del Peloponeso que surge por el miedo de Esparta al crecimiento de Atenas y al imperio. Hay un elemento psicológico que se entiende en esta lógica racionalista que va a circular en el siglo V a. C con la filosofía de Sócrates, Platón y otros autores. Evidentemente, estaba en un contexto que posibilitaba ese pensamiento”.
“Este libro busca entender el contexto en el que se tradujeron las obras de Tucídides, qué entregó este autor y porqué hoy lo leemos. Hay discursos de políticos contemporáneos como José Miguel Insulza que lo analiza y se refiere al Diálogo de Melios cuando presidía la Organización de Estados Americanos (OEA) para comparar las relaciones entre los países de América Latina. Siempre se usa como un modelo discursivo del poder a través de la Guerra del Peloponeso”.
En el libro, se aborda el valor que tiene la península ibérica en la difusión de la obra de Tucídides
“En España se ha trabajado la obra de Tucídides desde hace unos 20 años, sobre los primeros traductores. Algunas traducciones estaban perdidas en las bibliotecas y luego se empieza a estudiar el pasado de la monarquía, que fue vedado y la primera traducción data del siglo XIV cuando España no existía como Estado todavía y era una península con una serie de reinos individuales con muchos dialectos. La primera traducción era aragonesa, se asemeja al catalán y al castellano actual, pero es una lengua desaparecida. La primera traducción de Juan Fernández de Heredia se vincula después con el Papado en Aviñón y el poder político para tener un mejor diálogo con los embajadores y un mejor conocimiento diplomático”.
“En el siglo XVI, estos textos se transforman en una política de Estado, tanto Carlos V como Felipe II buscan rescatar estos documentos de la antigüedad para entender la lógica del imperio y efectivamente hay una discusión muy grande respecto a la calidad de estas traducciones, por ejemplo, la traducción de Diego Gracián de Alderete del siglo XVI contiene algunos errores, pero se mantuvo hasta el siglo XX y se estudia en las universidades”.
Por Juan Paulo Roldán
Dirección General de Vinculación con el Medio